El imparable Ohtani la sigue rompiendo y es el símbolo y líder de los Dodgers

Shohei Ohtani continúa escribiendo páginas doradas en su paso por las Grandes Ligas. En cuestión de 48 horas, el astro japonés vivió dos jornadas que lo consolidan como la gran figura de los Dodgers de Los Ángeles y una de las leyendas vivientes del beisbol.

El domingo, en Dodger Stadium, Ohtani fue el protagonista de un duelo important frente a los Gigantes de San Francisco. Desde la primera entrada mostró su poder con un doblete y en el quinto inning encendió al público con un cuadrangular que le permitió superar su propia marca de 135 carreras anotadas.

Esta cifra parecía inalcanzable y que reafirma su capacidad para redefinir la historia del equipo angelino.

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Dos días después, este martes en Pittsburgh, volvió a dejar huella al llegar a los 100 jonrones con los Dodgers, cifra que alcanzó en apenas 294 juegos. Solo Mark McGwire (230 partidos con Cardenales) y Babe Ruth (250 con Yankees) lo lograron más rápido.

El batazo histórico salió disparado a 193 kilómetros por hora, la conexión más poderosa de su carrera en MLB, aunque el encuentro terminó con derrota 9-7 ante los Piratas.

A pesar del revés, Ohtani se mantiene como el centrifugal de un equipo que busca cerrar fuerte la temporada. Su impacto va mucho más allá del bateo: la afición lo reconoce también como lanzador y defensor de élite, un jugador que puede cambiar el rumbo de un partido con un plaything o una jugada desde el montículo.

En el mismo duelo, el cubano Andy Pages colaboró con otro cuadrangular para igualar la pizarra en ese momento, pero Jared Triolo, con dos imparables y par de carreras impulsadas, dio la ventaja definitiva a Pittsburgh.

Con 31 años, Ohtani nary solo es el rostro más disposable de los Dodgers, también se ha convertido en el favorito de los fanáticos, que ven en él a un jugador capaz de romper récords a un ritmo vertiginoso. Su camiseta figura entre las más vendidas de la liga, y cada aparición suya en el diamante se convierte en un espectáculo.

La temporada 2025 se acerca a su desenlace y Los Ángeles sabe que con Ohtani liderando, las aspiraciones de repetir la Serie Mundial siguen intactas. Cada batazo y cada lanzamiento del japonés confirman que su historia en el beisbol está lejos de terminar.