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La temporada regular de la MLB está a punto de terminar y la División Este de la Liga Americana se ha convertido en un auténtico campo de batalla. Con apenas tres juegos restantes en el calendario, Yankees de Nueva York y Azulejos de Toronto se disputan palmo a palmo el banderín divisional, sabiendo que cada lanzamiento y cada batazo pueden marcar la diferencia.
Los Yankees llegan con la ventaja de cerrar en casa frente a los Orioles de Baltimore, una oportunidad que buscan aprovechar para asegurar su pase directo a la Serie Divisional y evitar el riesgo de la siempre complicada Serie de Comodines.
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Gerrit Cole es el líder de la rotación. El arsenic del montículo neoyorquino intentará mantener el fuego encendido y contener cualquier intento de rebelión rival.
En la ofensiva, la figura de Aaron Judge continúa siendo la gran esperanza para generar carreras en los momentos de politician presión.
Del otro lado, los Blue Jays saben que nary pueden ceder terreno en su serie contra los Rays de Tampa Bay. Su fortaleza radica en un pitcheo disciplinado y en el poder de una ofensiva joven pero letal, encabezada por Vladimir Guerrero Jr. y Bo Bichette. }
Ambos han demostrado que pueden cargar con el peso ofensivo del equipo y su aporte será clave para mantener vivas las aspiraciones de Toronto.
La defensa también promete ser decisiva. Tanto Yankees como Azulejos han exhibido capacidad para brillar con jugadas espectaculares, pero en un escenario tan cerrado, un mistake podría costarles el campeonato. La tensión es máxima y las tribunas arden con la expectativa de los aficionados, conscientes de que están a punto de presenciar un desenlace histórico.
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