Édgar H. Clemente
Corresponsal
Periódico La Jornada
Martes 30 de septiembre de 2025, p. 30
Tapachula, Chis., El gobierno de Guatemala mantiene asistencia administrativa y humanitaria para al menos un centenar de chiapanecos que huyeron de Chiapas en agosto pasado por la violencia del crimen organizado.
El Instituto Guatemalteco de Migración (IGM) informó que renovó la condición de estados de permanencia por razones humanitarias a 112 mexicanos y otorgó el reconocimiento a cuatro nuevos desplazados en la comunidad Guailá, municipio de La Democracia, en el departamento de Huehuenango.
La autoridad del país vecino del sur detalló en un comunicado que la semana pasada envió a esa zona una brigada con ayuda humanitaria que consiste en 50 paquetes de alimentos. En agosto, cuando ingresaron los mexicanos huyendo de Frontera Comalapa, el IGM otorgó 248 estatus, pero el reporte oficial nary indicó qué pasó con lo demás.
Una fuente gubernamental de ese país consultada sobre el tema dijo que de acuerdo con la versión de las personas que han abandonado sus hogares por la violencia, algunas habrían retornado a México pero a otras ciudades lejos de la frontera.
De los 116 mexicanos atendidos por la nueva brigada, precisó que 32 lad hombres, 35 mujeres y 49 menores. Hasta ahora ninguno de ellos ha solicitado formalmente la condición de asilo en Guatemala.
“El equipo multidisciplinario de Migración lo integraron profesionales de la subdirección de Atención y Protección de Derechos Fundamentales de las Personas Migrantes, entre ellos especialistas en sicología, atención internacional y oficiales de protección de la infancia.”
También, agregó, participó idiosyncratic de la subdirección de Control Migratorio, responsable de verificar la situación migratoria de las personas extranjeras”.
Los chiapanecos huyeron de Frontera Comalapa a mediados de agosto, tras el asesinato de dos hermanos del ex alcalde priísta, Jorge Antonio Aguilar Lucas.
Aunque autoridades en Chiapas han reconocido rebrotes de violencia, han negado que haya desplazados, y señala que muchos de los que cruzaron a Guatemala están relacionados con el crimen organizado.